14 / Diciembre / 2021

Ayer por la tarde la FCS entregó el quinto reconocimiento Emi D’Ambra a la labor política y Social a Rosa y Luis, madre y padre de David Moreno, asesinado por la policía en diciembre de 2001.

En la entrega del reconocimiento participaron la Decana María Inés Peralta, la Vice decana Jashele Burijovich, la Comisión de DD. HH. de la FCS e integrantes de todos los claustros de la Facultad.

Además, plantamos un nuevo árbol en el bosque de la memoria de Sociales, esta vez para homenajear y recordar a David.

 

El Reconocimiento a la labor política y social

Desde 2017 la Facultad de Ciencias Sociales de la UNC realiza la entrega del Reconocimiento Emi D'Ambra a la Labor Social y Política.

Este año distinguió a Rosa Martínez y Luis Moreno, mamá y papá de David Moreno, asesinado el 20 de diciembre de 2001 por la policía de Córdoba en Villa 9 de Julio en Arguello [Res.106/2017]:

Que la lucha de ambos fue incansable, y no sólo plantearon la lucha en el reclamo de castigo por el asesinato de su hijo, sino que se convirtieron en referentes de familiares de víctimas de violencia institucional y acompañaron los reclamos por los abusos policiales, que hasta el día de hoy sigue vigente, especialmente en la provincia de Córdoba.

Que transformaron su dolor en lucha, por sus activismos, movilización, compromiso y durante todos estos años, por no bajar nunca los brazos, ni por haberse dejado intimidar es que proponemos, a 20 años del asesinato de David, este reconocimiento. es que proponemos, a 20 años del asesinato de David, este reconocimiento.

 

“Lo único firme para nosotros es la ausencia de David”

María Inés Peralta y Jashele Burijovich entregaron el reconocimiento a la familia Moreno: Una escultura y un pañuelo azul de la Universidad Publica en donde se lee “David Moreno Presente”.

En este espacio de reflexión sobre nuestra historia, nuestras memorias y nuestras identidades, Rosa compartió: “en el juicio conocimos muchísimo de todo lo que había pasado. La imagen en la que David caé me acompaña. No guardo rencor, pero cuando recuerdo eso pienso que tienen que pagar lo hicieron. Estamos muy conmovidos porque es David el que esta presente hoy. Nuestra lucha sigue igual porque la condena no está firme. Agradecemos esta actividad porque nos ayudan a visibilizar y seguir adelante en nuestra búsqueda de justicia" y agregó: “increíble que hayan pasado 20 años, se nos fue la vida esperando justicia para que esto termine, se cierre. Sin embargo todo está en suspenso, siguen presentando recursos y nosotros no tenemos una condena firme. Lo único firme para nosotros es la ausencia de David. Hace 20 años que David no está”.

Rosa nos deja un desafío y una urgencia, seguir la lucha, “que se haya hecho un juicio por David alienta a las demás familias a seguir peleando”.

A su lado está Luis, y en su emoción un montón de personas que acompañaron esta lucha durante todo este tiempo, “la lucha continua y es permanente desde lo obrero y lo social. Mucha gente se arrimo a hacerse cargo de esta causa, vecinos del barrio nos acompañaron siempre, Jesús y Marta fueron muy trabajadores de la causa y nuestro agradecimiento”.

 

Un árbol de la vida

En el marco de conmemorarse los 20 años de las jornadas de diciembre de 2001 y siguiendo con las intervenciones de hacer un ritual de vida como momento en el cual recordar y reflexionar sobre las problemáticas que nos atraviesan como sociedad, en el bosque de la memoria de Sociales se planto un aromito en homenaje a David Moreno.

 

Un viejo-nuevo relato argentino: a 20 años del 2001

Durante diciembre de 2001, Argentina vivió una serie de acontecimientos que marcaron sensiblemente su historia institucional y política. En alrededor de sólo quince días el país tuvo  cinco presidentes, consolidó su default financiero, abandonó la férrea política cambiaria que desde  1991 sostenía y devaluó el peso. Todo ello en medio de una crisis socio-económica que todavía reclama recaudos extremos.

Alrededor  de  cuarenta personas  murieron  y  otras  miles fueron  detenidas.  Durante  todo  el conflicto,  muchos  comercios  fueron  saqueados,  un  gran  número  de  ellos  por  grupos  de personas provenientes de sectores relegados, y se produjeron destrozos en un clima violento que el Estado no pudo contener.

Desde la Facultad de Ciencias Sociales creemos que las jornadas de diciembre de 2001 y todo lo que siguió se deben estudiar y analizar critica,  cuidadosamente  y  desde  distintas  perspectivas, intentando reconstruir las tramas socio-polítcas de un momento parteaguas en el devenir argentino y regional.