08 / Abril / 2022

Una alumna de la carrera de Trabajo Social de la Facultad de Ciencias Sociales (FCS), Nayla Luz Prado, accedió recientemente a una Beca de Innovación Tecnológica Socioproductiva (BITS), otorgada por la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) Se trata de un hecho inusual, pues estas ayudas suelen adjudicarse en mayor medida a estudiantes, docentes, egresadas y egresados de carreras no vinculadas a las ciencias sociales. Como ella misma destaca, “hace poco tiempo que estas becas descubren y recurren a las ciencias sociales para entender cuáles son los aportes y los productos que aportamos en diferentes procesos, mucho más complejos -pero a la vez invisibilizados- que los producidos por otras ramas disciplinares”.

El proyecto presentado por Nayla Luz Prado se titula “Protocolo de atención de la salud a mujeres rurales del norte de Córdoba” y se propone implementar y/o profundizar mecanismos para el acceso a los derechos a la Salud Sexual Reproductiva y No Reproductiva (SSRyNR) en la zona, facilitar el acceso a servicios de salud con perspectiva de género y fortalecer las organizaciones comunitarias. Está dirigido por José Antonio Mántaras y codirigido por Eliana López y radicado en el Instituto de Política, Sociedad e Intervención Social (IPSIS) de la facultad.

La iniciativa surgió, según precisa su autora, “por la preocupación ante la ausencia de políticas públicas que aborden la salud en términos integrales. Los escasos recursos en territorio no logran contemplar la complejidad de la distancia y del transporte en la ruralidad, lo cual se vio agudizado por la pandemia de Covid 19 y por falta de formación en materia de derechos y géneros en las instituciones”.

La pretensión del mismo es co-construir un protocolo para el fortalecimiento interno de los colectivos de mujeres y promover instancias de intercambios con comunidades e instituciones locales. Este instrumento tendrá un componente informativo y de sistematización de los procesos organizativos, así como herramientas lúdicas/dinámicas para el abordaje de la salud de mujeres, niñas y jóvenes desde una perspectiva de género. Por ello, el proceso de construcción de dicho protocolo se concibe desde una articulación de saberes y conocimientos entre la universidad, las organizaciones sociales e instituciones y actores de la comunidad.

El desarrollo de la propuesta recupera y sistematiza conocimientos y acciones producidas desde la “Casa Refugio de la Mujer Campesina” de Sebastián Elcano y otros colectivos de mujeres del norte, como Las Violetas de Las Peñas, Mujeres del Norte de Cerro Colorado, Grupo de mujeres de Simbolar. Se involucra también al hospital regional y equipos de salud de la zona.

La iniciativa pretende dar continuidad a acciones que se vienen llevando adelante en territorios del norte cordobés, desde hace varios años, a través de proyectos y acciones del Programa de Extensión “Ruralidades: derechos y conflictos campesino indígenas” de la FCS, a través de becas de extensión y de prácticas de intervención pre-profesional. En ese sentido, es expresión de una voluntad institucional de trabajo continuado en esa región, con colectivos de la misma.

Recuperar “otras maneras de conocer”

Pero la beca también es el último eslabón de un intenso recorrido institucional de la propia Nayla, quien en la actualidad integra un equipo de investigación de la FCS –“EntreGeneraciones: Colectivo de Investigación-Acción con Jóvenes, dirigido por Patricia Acevedo y codirigido por Susana Andrada- y trabaja en proyectos de extensión vinculados a la SSRyNR de mujeres del norte cordobés. Pero, antes de ello, participó en el relevamiento del proyecto de investigación sobre “Desigualdades” de la FCS; en varios seminarios, proyectos y programas de extensión de la facultad; y fue beneficiaria de las Becas “Estímulo a la formación en proyectos institucionales” de la FCS.

“Para ser sincera, hasta el momento no había escuchado nada sobre la convocatoria a este tipo de becas de innovación tecnológica en nuestra facultad”, comenta Nayla. En una reunión del equipo de investigación en que participa se enteró al respecto, buscó información y consultó a sus docentes. “La mayoría de los comentarios fueron, justamente, que es una iniciativa súper interesante, pero poco frecuente en las ciencias sociales, dado que se considera que no somos las disciplinas más ´aptas´ para hacer tecnología”. Considera que “las líneas académicas de investigación e innovación tecnológicas clásicas vienen sosteniendo la tradición de contemplar las mal llamadas ´ciencias duras´ como aquellas que tradicionalmente ocuparon el centro del relato en el campo de lo científico. Desde esta posición hegemónica de la ciencia, se desconocen los saberes de las ciencias sociales, que recuperan otras maneras de conocer. Un conocer desde la práctica, desde el vínculo con otrxs, y desde los procesos de acumulación”, destaca Nayla.

 

Sobre las Becas BITS

Las Becas para proyectos de Innovación Tecnológica Socioproductiva (BITS) son impulsadas por las Secretaría de Extensión (SEU) y la Secretaría de Ciencia y Tecnología (SECyT) de la UNC. Este programa tiene una línea destinada a estudiantes de grado y otra a docentes y graduadas y graduados de la UNC. Las becas duran un año.

Entre sus objetivos se encuentran “promover la formación continua y la sociabilización de conocimientos, técnicas y metodologías de trabajo y la producción de nuevos conocimientos y metodologías aplicables a la resolución de problemas socio/productivos” y “la formación continua y la sociabilización de conocimientos, técnicas y metodologías de trabajo y la producción de nuevos conocimientos y metodologías aplicables a la resolución de problemas socio/productivos”.